“…Vivian horas inimaginables cogidos sobre la mano en las poltronas sobre la baranda, se besaban despacio, gozaban la embriaguez de las caricias sin el estorbo de la exasperacion. La tercera noche sobre sopor, la novia lo espero con una botella sobre anisado (….), necesitaba un poquito sobre aturdimiento de no pensar en su suerte con demasiada lucidez, sin embargo Florentino Ariza creyo que era de darse valor en el camino final.

Animado por esa ilusion se atrevio a explorar con la yema sobre los dedos su cuello marchito, el torso acorazado de varillas metalicas, las caderas de huesos carcomidos, los muslos sobre venada vieja. Ella acepto complacida con las ojos cerrados, No obstante carente estremecimiento, fumando y bebiendo a sorbos espaciados. Al final cuando las caricias se deslizaron por su vientre, tenia bastante anisete en el corazon.

-Si hemos sobre realizar pendejadas, hagamoslas –dijo- sin embargo que sea como los consumidores grande.

La llevo al dormitorio y no ha transpirado empezo a desvestirse sin falsos pudores con las luces encendidas. Florentino Ariza se tendio bocarriba en la cama, tratando de restablecerse el dominio, otra ocasii?n carente saber que elaborar con la epidermis del tigre que habia matado. La novia le dijo: “No mires”. El cuestiono por que carente apartar la ojeada del gloria raso. -Porque nunca te va a gustar- dijo ella.

Por lo tanto el novio la miro, desplazandolo hacia el pelo la vio desnuda inclusive la cintura, semejante como la habia imaginado. Tenia los hombros arrugados, las senos caidos y el costillar forrado sobre un pellejo palido asi­ como frio igual que el de una rana. Ella se tapo el pecho con la blusa que acababa de quitarse, asi­ como apago la luz. Entonces el novio se incorporo desplazandolo hacia el pelo empezo a desvestirse en la oscuridad, tirando sobre ella cada prenda que se quitaba, y no ha transpirado ella se las devolvia muerta sobre la risa……”

Dejo aca Con El Fin De nunca aburrirlos, aunque como lo saben, Florentino y Fermina nunca se separaron un separado instante en los dias siguientes.

Es una advertencia que nos da Garcia Marquez por medio de las dos protagonistas, una advertencia de humanismo, la demostracii?n de la humanizacion, una prueba bellisima sobre que definitivamente nos hemos alejado de el macho desplazandolo hacia el pelo sobre la hembra que unico podri­an obedecer a determinismos biologicos en el unico contexto sobre la reproduccion.

Amar desplazandolo hacia el pelo desear a las cincuenta, sesenta, setenta y no ha transpirado ochenta seri­a la victoria de lo simbolico, de lo imaginario y no ha transpirado de el erotismo sobre la aciago copula de los animales desplazandolo hacia el pelo desafortunadamente sobre algunos animales de la clase humana Ademi?s…

Por caso que Con El Fin De vivir esto seri­a preciso, como ya lo mencione, aseverar adios a los estereotipos culturales que constituyen a menudo modelos propias ataduras.

Es seguramente indispensable existir sido protagonista de lo que fue la revolucion pacifica de las chicas para resignificar las existencias bajo nuevos parametros; y se igualmente que todas las mujeres colombianas sobre mi edad no han podido aun vivir lo cual, quiero hablar de las profundos cambios en la identidad de la mujer que ocurrieron durante los ultimos cincuenta anos de vida.

Mi engendramiento pertenece a la procreacion sobre protagonistas historicas carente precedente: la ciudadania, hace exactamente cincuenta anos de vida, — obtenemos el derecho al voto — la anticoncepcion, que nos permitio por primera oportunidad en la biografia de la humanidad, separar por fin la sexualidad sobre la reproduccion, permite cuarenta anos de vida; la instruccion y no ha transpirado la universidad que nos posibilito comendar a existir desde un acontecer de si; el empleo que nos saco del huerto de antes asi­ como nos proporciono alguna autonomia e independencia economica.